Esta obra francesa del Dr. Gilbert Tordjman es, en sí, una larga conversación con el Dr. Paule Pérez acerca de una término que, paradójicamente, en la actualidad despierta gran interés: el de la Medicina Psicosomática. En sí, con la tecnología actual, el médico se encuentra cada vez más alejado de la relación inquebrantable entre Cuerpo y Alma, ante esto el paciente trata de buscar la solución a sus problemas con hechiceros, chamanes, lectores de cartas y demás ya que sus síntomas se hallan fuertemente vinculados con su hábitat, léase, condiciones socio-culturales, socio-económicas, su ambiente familiar y de trabajo, sus conflictos conyugales, su sexualidad y demás, factores que HAN SIDO OLVIDADOS por una medicina mecanizada que se basa en pruebas laboratoriales y demás auxiliares en el Diagnóstico. Un hecho muy importante es que la Medicina Psicosomática le da al Síntoma EL VALOR DE UN MENSAJE Y UNA FORMA DE COMUNICACIÓN, LO CUAL ES SUMAMENTE IMPORTANTE, para esto el médico debe observar cuidadosamente al paciente.
En el lado opuesto, encontramos a los Psicólogos los cuales no se preocupan del Cuerpo y se enfocan únicamente lo que llama ellos “curar el Alma”. La Medicina Psicosomática se sitúa a mitad del camino entre los 2 polos: nuestro Cuerpo y nuestro Psiquismo. Para el Dr. Pérez, la Medicina Psicosomática no pertenece al dominio de la Fe y esta nace con las investigaciones y estudios tanto de Freud como de Wilhelm Reich, éste último, que le daba una importancia fundamental al orgasmo, para esto, Reich decía que un organismo incapaz de liberar la tensión a través de un auténtico orgasmo experimentaba invariablemente un sentimiento de Angustia. Esto consecuenta con todo nuestro organismo y se traduce en una especie de “Memoria Celular” con lo cual toda nuestra vida queda marcada. Es un hecho que la Depresión, la Angustia, el Stress, la Ira, el Deseo se manifiestan por signos exteriores evidentes pero también por modificaciones fisiológicas internas, ante estos eventos, se mencionan los estudios realizados por Freud en relación con la Histeria. Un punto muy importante es lo que sucede con el lactante cuando no puede expresar con palabras sus incomodidades o sufrimientos, en estos casos el niño presenta Insomnio, Hiporexia, Vómito, Encopresis, etc, etc, manifestaciones clínicas que nos señalan su inconformidad la cual puede persistir hasta la Vida Adulta.
A estas condiciones, el Dr Pérez les llama Emociones Significativas ya que remiten al individuo hacia un conflicto antes del comienzo del Habla, pero también existen trastornos condicionados por nuestro entorno, nuestro ambiente. Es aquí donde entra en juego el tan mencionado Stress. Aquí se menciona el desarrollo de una nueva patología vinculada a la aparición de Los Grandes Conjuntos (enormes ciudades llenas de tráfico, ruido, urbanización, superpobladas) en donde el Hombre se encuentra solo, iracundo y puede desarrollar manifestaciones corporales………..