Pollinaza: amenaza sanitaria y nuevas enfermedades.

La Naturaleza, con su sabiduría perenne, siempre pone límites. Hace algunos años, la alerta mundial sobre «La Enfermedad de las Vacas Locas», conocida en el ámbito científico como Enfermedad de Creutzfeldt-Jakob, causó más que interés, revuelo y expectación por las características clínicas que se presentaban en aquellos afectados -animales y humanos- los que nos llevó a comprender cual era la causa básica de éste padecimiento: la ingesta de cárnicos procedentes de restos de ovejas y otros mamíferos, los cuales eran incluidos en la dieta de animales estrictamente vegetarianos como son los vacunos. Ahora, el 31 de enero del 2012, un  nuevo reto se presento para el corrompido sistema agropecuario mexicano: en el Edo. de Veracruz, se encontraron cientos de animales muertos en localidades cercanas a esta ciudad como consecuencia de haber ingerido un supuesto «alimento» llamado «pollinaza» o «gallinaza», una sustancia aberrante: un compuesto elaborado por EXCREMENTO DE AVES DE ENGORDE como son pollos, gallinas, pavos, etc, etc, que mezclado con plumas, residuos de alimento aviar, cenizas, olote de maíz y en algunas ocasiones melaza, se da como «alimento» a los bovinos. Esta combinación es de gran utilidad de los ganaderos ya que provoca el aumento de peso, crecimiento y temprano sacrificio de las reses, sin embargo, provocando, la alteración sistemática del ciclo biológico NATURAL de los animales, todo en función de un solo objetivo: las ganancias económicas.

Al ser un producto de desecho, la «pollinaza» contiene abundante cantidad de Nitrógeno, el cual se transforma en el organismo animal en Amoniaco lo cual llega a provocar una especie de Encefalopatía Tóxica que causa la muerte del mismo. Es un Cuadro Clínico semejante al que se produce en el paciente cirrótico alcohol-nutricional; éste desecho que es dado a los noble bovinos, también conlleva una serie de bacterias entre las que destaca la Salmonella y el riesgo más importante es que también es consumido por vacas lecheras.

Como es costumbre en éste corrupto país, las «autoridades competentes» se han encargado a minimizar los hechos (existe el antecedente en los ganaderos de Culiacán, Sinaloa de un caso parecido hace cerca de 4 años), sin castigar a los responsables Y SIN VIGILAR que es lo que se va a hacer con esos animales – hacer memoria de lo acontecido hace algún tiempo con el Clembuterol que todavía se administra al ganado de engorde- ya que con toda seguridad, esa carne se encuentra en los mercados locales ya que el ganadero no está acostumbrado a tener pérdidas económicas.

Las condiciones y/o circunstancias por las cuales el Hombre ha violado las pautas de La Naturaleza son incontables, sin embargo, la emergencia de nuevas enfermedades como consecuencia de esto están a la luz del día, listas para manifestarse de un momento a otro.